Mañana, día 23 de agosto, empezamos nuestra campaña de vendimia en la DO Valdeorras. Esta será nuestra vendimia número 36 y la más temprana de la historia de la bodega, superando a la del año 2020 que empezamos el 24 de agosto.
Después de un año extremadamente seco, con un invierno no muy frío y un verano con olas de calor que alcanzaron máximos históricos de temperatura, el viñedo ha demostrado que es un cultivo que aguanta en situaciones extremas. Con todas estas inclemencias descritas llegamos al momento de cosecha con una uva muy sana, de grano pequeño y apretado, con menos mosto en su interior pero más concentrado, y con una producción por hectárea inferior a lo habitual. Se espera que esta va a ser una añada muy peculiar y diferente. Aún así con unos parámetros de acidez y graduación alcohólica propios de esta variedad.
No obstante, destacamos que los grandes vinos suelen
aparecer de suelos pobres y años donde la planta vive con dificultad, y quizás
el resultado de este año pueda ser sorprendente en cuanto a su calidad. Es una
incógnita como va a evolucionar pero esta es también la magia del mundo del
vino que cada año es diferente.
Los vendimiadores abrirán vendimia en la finca Pancho (O Barco) y está
previsto que durante unos 10 días se recolecten cerca de 160.000 kilos de uva
en unas 27 hectáreas de viñedo propio de godello. La bodega cuenta este año con
nuevos viñedos que entran en producción.